Esta magnífica propiedad se sitúa en el llamado Ensanche del Raval, la mejor zona del barrio. El edificio de 1881, obra del prolífico arquitecto Jaume Gustà i Bondia, dispone de una impresionante entrada donde se aprecia el valor arquitectónico de la misma. La fachada se caracteriza por algunos elementos singulares, como los falsos sillares de estuco de la cantonera, que se repiten en el resto de menaje delimitando los ejes verticales, los frontones que coronan las aberturas, o las pilastras del piso superior.
Esta inmaculada propiedad consta de 134 m2 interiores, a los que se le suman 21 m2 de terrazas. La vivienda no solo destaca por su tamaño sino por su altísima calidad y el excelente buen gusto en cada uno de sus rincones, respetando su esencia, pero integrando conceptos y materiales de diseño de interiores contemporáneos; creando una perfecta y armoniosa atmósfera.
La vivienda está distribuida de la siguiente forma:
– Gran salón con paredes acristaladas hacia la calle y chimenea.
– Gran zona de comedor-cocina abierta y exterior, integrada con el área del salón.
– Suite exterior con amplio espacio de vestidor; moderno cuarto de baño y salida a terraza. Esta terraza tiene un cálido ambiente natural gracias al bambú y mobiliario de madera. El cuarto de baño de la suite es en tonos tierra y madera, con grifería de diseño.
– Segundo y amplio cuarto baño con ducha, tina y mobiliario de diseño.
– Habitación doble con terraza propia.
– Habitación individual.
Todas las estancias y espacios comunes tienen un excelente sistema de iluminación integrado en los techos altos, los cuales conservan su diseño genuino con bóvedas catalanas. El suelo es de parquet de alta calidad combinado con suelo de diseño de la casa Porcelanosa, en la zona del salón-comedor. También dispone de aire acondicionado y calefacción.